En vista del exito que tienen estas chorradas, me parece que vamos a tener que cambiar la filosofia «oscurita» de «la isla» y hacerla de color «rosadita»… al menos llegarian mas mujeres, no?
Pues aqui sus dejo, con el link que nos mando Amaranta y que aunque no nuevo, vale la pena LEER MAS >>>, de como los famosos, piden y piden, y piden…. las mas grandes chorradas del planeta.
Angeloso
Caprichos de los famosos
Los lujitos extra?de las estrellas
 |
 EFE Paulina exige charolas de quesos franceses para su perrita. |
Beatriz Rojo Polo, EFE
 |
Estrellas vemos, berrinches no sabemos |
 |
Excentricidades de los cantantes |
A los famosos les gusta sentirse privilegiados, mimados, diferentes al resto de los mortales y se encargan de dejarlo claro con peticiones y antojos que difieren mucho de lo que llamar?os «normal». Los hay exigentes en cuanto a su cuidado personal, higiene, espacios en los que habitan e, incluso, aut?icos malcriados que pelean por ver qui?es m?estrafalario.
Estrellas vemos, berrinches no sabemos
Muchos astros de la gran pantalla y divos de la canci?iden su poder medi?co y de convocatoria, reafirman su cach?n definitiva, por medio de sus exigencias contractuales.
Es una especie de no eres tanto, si no pides mucho. Y es que hay algunos caprichos que a fuerza de extravagantes parecen incluso indeseables.
 Fotos |
 |
||
 |
|
|
|
En su viaje a la ciudad colombiana de Bogot?JLo y Marc Anthony exigieron como parte indispensable del contrato que les cerraran un centro comercial para ir de shopping sin el agobio de la gente, sin sentirse observados por las hordas de fans que les persiguen a todos lados.
El resto como siempre en LEER MAS >>>
AngelosoCaprichos de los famosos
Los lujitos extra?de las estrellas
|
EFE Paulina exige charolas de quesos franceses para su perrita. |
Beatriz Rojo Polo, EFE
|
Estrellas vemos, berrinches no sabemos |
|
Excentricidades de los cantantes |
A los famosos les gusta sentirse privilegiados, mimados, diferentes al resto de los mortales y se encargan de dejarlo claro con peticiones y antojos que difieren mucho de lo que llamar?os «normal». Los hay exigentes en cuanto a su cuidado personal, higiene, espacios en los que habitan e, incluso, aut?icos malcriados que pelean por ver qui?es m?estrafalario.
Estrellas vemos, berrinches no sabemos
Muchos astros de la gran pantalla y divos de la canci?iden su poder medi?co y de convocatoria, reafirman su cach?n definitiva, por medio de sus exigencias contractuales.
Es una especie de no eres tanto, si no pides mucho. Y es que hay algunos caprichos que a fuerza de extravagantes parecen incluso indeseables.
| Fotos |
|
||
|
|
|
|
En su viaje a la ciudad colombiana de Bogot?JLo y Marc Anthony exigieron como parte indispensable del contrato que les cerraran un centro comercial para ir de shopping sin el agobio de la gente, sin sentirse observados por las hordas de fans que les persiguen a todos lados.
No contentos con dicho privilegio, pidieron ser alojados en una mansi?lejada del n?o metropolitano, lejos del ruido y con los seguros pertinentes para prevenir incidentes con sus admiradores, que no lo ser? tanto si conociesen el rechazo que provocan en sus ?los.
Y si se trata de cuidarse, la Lopez no escatima ya que frota su anatom?con la crema La Mer, que vale $1200 un tarrito de 16 onzas (poco m?grande que una lata de refresco).
Y a pesar de que ella sigue siendo una chica latina del Bronx, andar no es lo suyo si no paga a un personal trainer para que la obligue. En Inglaterra contrat? convoy de siete limusinas para que la llevaran a almorzar ¡a dos cuadras del hotel!.
Parece que compiten entre s?ara ver qui?pide la mayor cantidad de excentricidades. Resulta incluso estresante. Las malas lenguas aseguran que el rey del pop, Michael Jackson, en su gira por el pa?de la pampa pidi?a determinada m?ina de pinball para jugar, que hubo que rentar a una prestigiosa multinacional de videojuegos y trasladar hasta la ya de por s?ant?ica suite del hotel donde se hospedaba. Por lo visto al cantante se le hab?antojado, asegurando que anular?el concierto en la cancha del River si no consegu?su anhelado Pinball.
Pero el famoso exc?rico, no se queda solo en esto de pedir, y es que los ricos y famosos parece que no aprendieron bien de chiquitos aquello de pedir es de mala educaci? m?bien parecen adeptos del dicho: «el que no llora no mama».
Paulina hace honor a su apodo.
Otra latina muy en boga por su reciente matrimonio con el espa?'Colate', es Paulina Rubio, que se hace con la medalla de oro en cuesti?e caprichos, y es que por algo la llaman la 'Chica dorada'.
En ella todo es exclusividad y lujo. En Per?n recuerdan su estad?por lo incre?emente pesada que se puso la vocalista, y es que su wish list parec?el cuento de nunca acabar: que si un camerino de 40 metros cuadrados, agua mineral en tres temperaturas distintas, sushi de del mejor catering de Miami, vitaminas azucaradas y toallas blancas perfumadas. Cuando lleg?la sesi?e fotos, mir?do y no toc?solutamente nada. Esto si es una diva.
Tambi?le gusta ir de compras. Le encantan los zapatos mexicanos y le gusta comprar por internet. La cibern?ca beldad, seg?icen los rumores, lleg?gastar $3000 en cuatro pares de botas.
Pero Pau no es ego?a e igual que se cuida a ella, le gusta mimar a sus seres m?queridos. Miranda, su perrita (que muri?cientemente) y de la cual no se separaba, era una renombrada gourmet y la artista ped?bandejas de queso franc?para su cachorro.
La reina de los «locos bajitos», Xuxa, viaja a todos lados con su cocinero personal. Alejandro Sanz, que presume de ser humilde, tampoco se libra de pedir, ya que no entra a un camerino sin que tenga grandes cantidades de cerveza.
Madonna, por su parte, entre otras muchas cosas, pide agua mineral francesa. Y Mariah Carey usa el l?ido franc?para ba?e ella y su mascota. Adem? pide que le coloquen una tapa nueva al inodoro y las s?nas de hilo que env?al hotel deben estar ya en la cama cuando ella llega. Leer para creer.
En cuanto a las estrellas del celuloide, no se qued?atr? tambi?ellos necesitan ciertas diferencias para sentirse a gusto. Ben Affleck adora el juego, en concreto el black jack. Aunque parezca incre?e, no es en el juego donde se deja su fortuna, sino que ?e le financia sus peque?caprichos: enormes cantidades monetarias gastadas en ropa de marca. Se rumora que lleg?gastarse hasta $18000 en trajes de Gucci y Dolce & gabbana, sus dise?res predilectos.
Sus facturas no se quedaron ah?a su esposa, Jennifer Garner, la agasaja en igual medida, aunque nunca se vio su cuenta tan da? como cuando manten?una relaci?entimental con Jennifer L? a la que le compr?n Rolls-Royce Phantom, que cuesta la friolera de $350 mil, un Ferrari de $230 mil, un anillo de diamante rosado de $1.2 millones y un inodoro con incrustaciones de rub?, zafiros, perlas y diamantes. Escatol?amente enternecedor, caro y de mal gusto.
Pero si cre? que los lujos rid?los eran propiedad exclusiva de los fr?los actores y cantantes, se equivocan, renombradas personalidades del mundo de las finanzas y la pol?ca, se conforman a golpe de chequera con lujos tan exc?ricos como innecesarios.
A Bill Gates, considerado el hombre m?y rico y poderoso de la tierra por la revista Forbes, tambi?le va la buena vida. Aunque en su caso est??justificado por las cuantiosas sumas de dinero que dona a los desfavorecidos. Tiene incluso una fundaci?abilitada al efecto.
No obstante, y sin que sirva de eximente, Gates es un ?do coleccionista. El magnate del software se compr? propio avi?or $21 millones y adem?gast?0.8 millones en uno de los manuscritos originales del polifac?co artista italiano Leonardo Da Vinci.
Tras el ?to televisivo de Friends, Matthew Perry, el m?dicharachero de la pandilla de la caja tonta, ya no se preocupa por las facturas, y no le tiembla la mano al firmar un cheque cuando se trata de darse placer.
En un viaje a Londres para ser parte de la producci?span style=»font-style: italic;»>Sexual Perversity, el astro de la televisi?mericana decidi?e no ten?suficiente espacio para estar c?o. ¿La soluci?Rent?es penthouses en Londres que le costaron 5 mil d?es por noche, casi nueve veces m?que lo que le estaban pagando los productores del show.
El cantante Luis Miguel es otro de los m?exigentes. Cuando est?ando conciertos pide cortinas negras en su estancia que impidan la filtraci?e la luz. En su camerino debe haber agua embotellada, bebidas energizantes, carnes fr?, fruta, tequila, vodka y whisky, y siempre se hospeda en la suite presidencial donde, por supuesto, las toallas ser?totalmente blancas.
Respecto a los olores tambi?es exigente: velas con olor a vainilla, tumbona de masajes, bicicleta para mantenerse en forma y un chef exclusivo que le cocine comida turca y ensaladas ex?as son otras de las exigencias de sus contratos.
El post original salio de aqui